Naranjas y Limones
Un día
te levantas, lo ves todo negro, ves nubes del color del cabrón y como los rayos
son la única luz que entra en tu apagado día. Sales de casa mientras eres
incapaz de recordar ese sentimiento que antes te daba alas, y ahora mismo te
las está cortando, y te resignas a caminar por una carretera que no lleva a
ninguna parte.
Pero a
mitad del camino te paras en seco. Echas la vista atrás y observas el camino
recorrido, levantas la vista y miras a los cielos encapotados, cierras los
ojos, y buscas esa gota de luz. Se cierran los sentidos y buscas en tu corazón,
te encuentras a ti mismo y cuando los abres, resulta que ha dejado de tronar.
Hay un
dicho que dice que en esta vida, mientras buscas a tu media naranja, siempre es
bueno ir probando alguna que otra mandarina y catando algún que otro limón. Y
la mejor forma de olvidar a un limón amargo, no es otra que con una buena caja
de naranjas a granel.
Vive
la vida como merece ser la vivida y nunca dejes que nadie apague tus días,
sonríe a cada hora, a cada instante y a cada segundo, porque la mañana menos pensada,
alguien puede enamorarse de tu sonrisa.
*Dedicado
con mucho cariño a una persona que me recuerda que vale
la pena luchar por lo que crees, independientemente de que los demás piensen si
es o no lo correcto. Deli, esto es para ti.