Imposible
Hoy he quemado la cinta que me
regalaste y las fotos que guardaba en mi caja de latón. He aprendido que la
vida no son dos días que vivir rápidamente, si no dos días de los cuales hay
que disfrutar cada segundo con menos intensidad que el siguiente, pero con más
que el anterior.
Hoy he abierto esa caja que juré dejar
cerrada. Encontré las promesas olvidadas del pasado convertidas en ceniza, ese
trozo de papel con la palabra imposible tachada del día en que nos dimos
nuestro primer beso, he quemado el pasado para que sea el abono de mi futuro.
Los imposibles no son posibles solo
contigo, los posibles, al fin y al cabo, se logran con cada latido, con cada
sonrisa, y con cada sentimiento que aflora en el pecho. A veces vivimos
demasiado tiempo con la vista en el pasado, pero es hora de que el mundo vuelva
a arrancar de nuevo, de que los kilómetros se pongan de nuevo a cero, y de
disfrutar de la que será mi última noche a tu lado.
Porque los imposibles, al fin y al cabo,
albergan un posible, y mañana… Mañana será un día mejor, eso nunca lo dudes.
*With love, for
Adelina