Cuestión de Alturas
Me hago una pregunta, y es si un ladrón de guante blanco se relaja antes o después de cometer su acto delictivo. Hay quien roba por placer, otros por necesidad, y otros, simplemente, por el hecho de sentirse alguien importante. Suelen hacerlo de noche, bajo la atenta mirada de las estrellas y de la luna, bajo el vals que gimen los vientos y la niebla que oculta sus pasos. Con el paso de los años los ladrones tienden a acomodarse en una casa del Algarve portugués, disfrutar de la buena fortuna acumulada tras años de saqueo como un ciudadano más, y disfrutar de los centenares de atardeceres que le queden hasta que la parca vaya a visitarlo. Pero siempre se tiene que tener presente que la piel se arruga, que el pelo se vuelve blanco, y que sin que nos demos cuenta, los días se acaban convirtiendo en años. No obstante lo importante no debe cambiar; la fuerza y la convicción no tienen edad. Después de cada llegada hay una partida, detrás de cada logro, hay un nuevo desafío. Co