Soltando Lastre
No
somos superhéroes ni nada que se le parezca, sino más bien todo lo contrario.
En esta vida la victoria no siempre viene de la mano de aquellos que más
aparentan, o más lástima pretender dar, si no de aquellos que guardan silencio,
observan, y actúan.
Cuando
llevas dedicada parte de tu vida a algo, a un ideal por ejemplo, es difícil que
te hagan renunciar a eso por lo que llevas años luchando a cambio de un bonito
despacho, una vida cómoda, y sabe Dios cuantas cosas más que te puedan contar.
Te prometen el oro y el moro, pero a
cambio debes renunciar a tu formación, a tu espíritu, y a todo lo que has
defendido y por lo que te has partido la cara.
Hay
gente que acepta estas condiciones sin pensárselo dos veces, otras en cambio…
Necesitan su tiempo para pensar.
¿Qué
es mejor? ¿Una vida llena de cargos adinerados sin motivación alguna, o una
vida sencilla de la que estés orgulloso de vivir? Supongo que ha llegado la
hora de soltar lastre, de reconducir mi camino a esa senda de la que nunca tuve
que haber salido, y de rendir solamente cuentas al mar, al viento, y a mi
propia libertad de elección.
Más
adelante… Ya veremos, pero es la hora de ser egoísta y de seguir mi propio
camino, no el que quieren que siga. Como
dijo un gran hombre: “Soy el dueño de mi destino; soy el capitán de mi alma”, y
la palabra de un verdadero hombre, debe ser verdadera ley.