Decisiones, decisiones
Lloverá agua ardiendo del
cielo y los rayos resquebrajarán la tierra, el sol dejará de salir por el temor
a ser secuestrado de todo su esplendor, y la envidia y maldad serán la moneda
de cambio para el pago de las atrocidades que se quieran cometer.
Dejarán de triunfar los sueños
y las esperanzas para que solo triunfe el silencio y la crueldad. Para que
aquellos que solo tienen por ansia aplastar los sueños de los demás, sean felices por ser
incapaces de hacer realidad los suyos propios.
Entonces nos reuniremos
aquellos que tenemos algún anhelo en la vida a la sombra de las antorchas, en
silencio y como siempre se ha hecho para las grandes ocasiones. En los grandes
momentos.
El único escudo que nunca se
resquebraja es aquel que no se tiene, y cuando se lucha a pecho descubierto por lo que vale la pena, siempre se muestra
alguna que otra cicatriz con orgullo. Como dijo Peter Drucker: donde hay una
empresa de éxito, siempre habrá alguien que haya tomado una decisión valiente.