Marmor Proconnesium
No
colega, ya no sirve ni escuchar “The Islander” ni las canciones del pasado.
Esta de puta madre tirar de raíces, pero a veces para avanzar es necesario
cortar amarras.
Nunca
olvides que las escaleras de mármol son las mismas que una vez te hablaron del
cofre y de la cerradura dorada. Esa leyenda que mal entendida te dio una hostia
mal dada y te dejo noqueado en busca del siguiente “Érase una vez”. Pero hijo mío,
es que no aprendes.
Que
por todas las capas de mierdas que lleves encima sigues siendo tú, y eso jamás
se cambia. Que sigues siendo fiel a unos valores y principios de los que te has
armado y por los que, jamás olvides, son los que te hacen estar donde estas.
Siguen
siendo los helados peldaños de mármol que marcan el destino, y siguen siendo
los mismos peldaños los que marcan el final de la escalera. Bajo la misma luna,
bajo el mismo sol.