La promesa
Llega
un momento en el que desconoces todo lo que está por venir. Que desconoces los
pasos a seguir y que la incertidumbre se transforma en tu moneda de cambio. Que
el camino se hace difuso y lo único que tienes por certeza, es que solo te
queda caminar hacia adelante.
Llegan
esos instantes en los que la bruma comienza a levantarse, esos momentos en los
que el sol comienza su batalla sin cuartel contra la niebla, y entonces
escuchas el ligero eco que nace del pecho con la única misión de indicarte que continúas
con vida.
Desconoces
lo que hay al otro lado.
Desconoces
por completo si saldrá bien o saldrá mal, si es lo correcto o lo incorrecto el
tirarte al vacío si con ello sigues caminando hacia adelante. No sabes si será
como el paso de la fe en “Indiana Jones y la Última Cruzada”. Lo único que
tienes claro es que seguir caminando es la única opción.
Que siempre
recuerdes el punto de partida. Que nunca te veas obligado a dar un paso atrás.