Sol de invierno
Es como cuando se rompe un vaso. Ese momento en el que el
cristal rompe contra el suelo y todo se queda quieto, frío, calmado.
Hay momentos que todos sufrimos tarde o temprano. Momentos
que te forjan el carácter y te cambian como persona, que te hacen crecer, y
aunque tu creas que el túnel no tiene fin, créeme, lo tiene. Sé agua, que ella siempre encuentra la salida.
Las estrellas tienden a apagarse. Como todo y para todo hay
un principio, un viaje, y un final.
No importa el dinero que tengas, o lo que
aparentes, al fin y al cabo, una estrella de verdad brilla siempre y cuando sea
sí misma, que sólo quiera alumbrar a los demás, y dejar esa estela en la que
pedimos un deseo. Por fugaz que sea. Esas son las estrellas que siempre
brillarán allí arriba.
Y el eco de la luz de esta estrella no se apaga cuando ha
dejado de brillar, porque su pulso, y su sonrisa, siempre estará en nuestros
corazones.