Recomienzos
Apagar
el móvil para coger aire. El sonido del viento meciendo las hojas de los
árboles. El susurro del agua que corre acallándolo todo. Los rayos de sol que
te hacen ver blanco cuando cierras los ojos. La calma. La quietud.
Encontrarse
en paz conlleva más tormentas que días de sol, y más marejadas que aguas en
calma. El enfrentarse a lo que pueda venir necesita de romper los límites, de
romper mentalmente y de continuar mirando hacia adelante. Aunque pese, aunque
duela, aunque sufras.
Siempre
ha existido la primavera después del invierno, y siempre hay esperanza mientras
tengas con quien compartirla. Porque todos hincamos la rodilla alguna vez en la
vida, aunque no lo digamos y nos levantemos a solas, pero no existe quien no sufriera antes de disfrutar de las
victorias.
Confía,
y sobre todo si tienes en quien poder hacerlo. Porque todo ocurre por alguna
razón. Todo pasa y todo llega. Y de los momentos más duros, todos salimos más
fuertes.