Escaleras al cielo
Y estás
delante de la escalera.
Ya el
hecho de asumir que vas a subirla es un paso hacia adelante. Pero cuando comienzas a poner un pie encima de cada peldaño, empiezas a darte cuenta
del miedo que da tener tu cuerpo apoyado en un solo pie mientras el otro está
en aire.
Que ser
imparable es una curva con subidas y bajadas con la mirada puesta en el futuro, que la confianza es una curva
exponencial enfrentada en su eje X con el tiempo. Que hay abrazos que cuando
cierras los ojos, es como si los estuvieras reviviendo. Ojalá vivirlos de nuevo.
Que somos
el tiempo que nos queda mientras se consumen las cerillas, pero primero no
dejamos de ser las vacaciones en una tormenta antes de hacernos viejos, que
como dicen los de Viva Suecia: es algo que voy a hacer por ti.
Y porque cruzar esta tormenta, primero y antes de nada, es lo que debo hacer.