Mon destin
Que no te importe si los demás te ven raro por ser fiel a tus creencias o a ti mismo; quien te quiere no necesita de tus explicaciones, quien te odia no las escuchará, y quien no pertenezca a alguno de estos dos grupos, se la bufará por completo.
La clave de todo siempre es no perder el norte. Como me escribía un lector de este blog la semana pasada: la aceptación no pocas veces es la única salida para recuperar el equilibrio y, para saber aplicarla cuando realmente se necesita, se precisa de entrenamiento, como tantas otras cosas en la vida.
Da igual que te juzgue quien no lleva tus zapatos; nunca te conviertas en esa clase de personas que prefieren complacer a los demás renunciando a ser uno mismo, que prefieren desgastarse viviendo una vida para la que no han nacido.
Ser auténtico te traerá tanto amor como odio, y odio, especialmente, de quienes no pueden domarte. Porque si escoges el difícil camino de ser fiel a tu corazón, tarde o temprano descubrirás que todo vale la pena.
Absolutamente todo.